13.03.2014 12:58
Uruguay, Las Malvinas y Argentina
Porque razón Uruguay apoya a la Argentina en su reclamo sobre las Islas Malvinas? Porque no hacer como hicieron Brasil y Argentina durante los 4 años que estuvieron los puentes cortados: plantear que es un asunto bilateral entre Argentina e Inglaterra?
Que beneficio obtiene Uruguay al defender el reclamo Argentino sobre las Islas?
Porque no planteamos que en realidad Las Malvinas son Uruguayas, según reza el tratado firmado con España en el cual nos cedió antes que a Argentina Las Malvinas y otras islas vecinas.
El presidente viaja buscando inversiones a uno y otro país, y luego ante la más mínima molestia Argentina borra de un plumazo un ingreso al país de U$S 300 millones por año, impidiendo el ingreso a Montevideo de buques con bandera de las islas.
O sea que en poco más de 3 años dejamos de percibir un ingreso similar a la inversión de UPM (ex Botnia), que fue la más grande que se registró en el país.
Y a cambio de ese gesto que nos da Argentina?
Demoró 4 años en levantar el bloqueo a los puentes y ahora intenta bloquear militarmente el puerto de Montevideo, acosando con buques de guerra a barcos pesqueros que salen del mismo. Ahora también tenemos el intento de bloqueo económico hacia el turismo que viene de Argentina, impidiendo la compra de dólares a los Argentinos en su país.
Bloquea y demora el dragado a mayor profundidad del canal Martín García, no autoriza a ampliar los muelles de Nueva Palmira, además de obstaculizar el tráfico de barcazas hacia dicho puerto que circulan por el Paraná. Bloquea sistemáticamente el comercio de productos Uruguayos a pesar que nuestro comercio es deficitario. Y ni hablar de las acciones Argentinas ante la OCDE exponiendo a Uruguay a un grave daño a nivel internacional, mientras se supone que existía un excelente relacionamiento entre los presidentes Uruguayo y Argentino.
Además Argentina ha demostrado no respetar ningún tratado o acuerdo de los que ha firmado, dado que no respetó la libre circulación establecida en el Mercosur y no respetó el fallo del consejo arbitral del Mercosur. Tampoco respeta los acuerdos sobre el monitoreo de Botnia, dado que se niega a divulgar los resultados del mismo porque son adversos a su suposición de contaminación de la planta.
Tampoco son actitudes recientes, históricamente siempre hemos que tenido que lidiar con la soberbia y prepotencia porteña desde la época de la colonia y los tiempos de Artigas. No dudaron en ese momento en entregarnos a los Portugueses con tal de defender sus intereses y sacarse de encima la molesta presencia de Artigas.
Considero que es hora de dejar de mirar nuestro relacionamiento con otros países en base a pretensiones e ideales que no se corresponden con las actitudes reales de nuestros vecinos.
La actitud de Argentina ha sido de un acoso y perjuicio permanente hacia Uruguay, con medidas de bloqueo físico civil, freno permanente al desarrollo de infraestructura portuaria, intento de bloqueo de inversiones en el Uruguay, bloqueo económico con trabas al comercio, presiones a nivel del Mercosur para que no se firme tratados de libre comercio con EEUU, acciones de perjuicio diplomático mediante la OCDE, y ahora acciones de bloqueo militar al puerto de Montevideo absolutamente improcedentes. Todas estas acciones en agradecimiento al permanente respaldo Uruguayo al reclamo Argentino sobre las Islas Malvinas.
Podría pensarse que entre todas estas acciones y una declaración de guerra hay una distancia muy pequeña. Uruguay debería buscar aliados reales, que estén dispuestos a defenderlo ante este tipo de agresiones u otras futuras, y no que miren para el costado como ha hecho sistemáticamente Brasil. Debería replantearse su vinculación al Mercosur, dado que uno de sus socios lo agrede sistemáticamente, y el otro no lo defiende ni hace ningún intento porque se cumpla lo estableció en los tratados firmados.
Debería además dejar de respaldar el reclamo Argentino por Las Malvinas, dado que ello no nos produce ningún beneficio, además de que nuestro vecino no valora en nada nuestra solidaria posición. Y por último, tal como hizo nuestro ex presidente, debería salir a buscar apoyo diplomático y militar ante el acoso y atropello de nuestro vecino, el cual solo se verá frenado ante un respaldo de importancia, y no por la buena voluntad y buena vecindad que demostremos.
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